Diciembre es un mes festivo por excelencia. Si bien en contexto de pandemia las reuniones sociales estarán limitadas y sujetas a los protocolos correspondientes, habrá momento para festejar y brindar por el cierre de un nuevo año.
Para estas fechas es común dejar de lado los hábitos saludables que muchos mantienen durante todo el año. Por costumbre o tradición, solemos consumir alimentos que contienen una densidad calórica que no coinciden con las temperaturas de nuestro hemisferio, además de ingerir bebidas alcohólicas. Esta ingesta generalmente se realiza en un periodo corto de tiempo y se vuelve más pronunciada si el comportamiento alimenticio de la persona es balanceado y saludable.
Para evitar complicaciones en un momento que debería ser de festejo, te dejamos estos consejos para comer rico y sano, pero por sobre todo, para cuidar de tu salud.
A la hora de preparar la cena de Navidad y Año nuevo, sugerimos:
Pensar un menú general, que sea equilibrado y que incluya carnes y vegetales. Incorporar variedad de frutas y verduras en los platos. Una buena opción es preparar dos tipos de carne (cerdo y pollo, por ejemplo) y 2 ó 3 guarniciones preparadas con frutas y verduras.
Incluir frutas en el postre. La ensalada de frutas con helado, una opción bienvenida y apta para todos los gustos y edades.
Moderar el consumo de bebidas azucaradas y alcohólicas.
Para acompañar el brindis elegí dos tipos de dulces. Puede ser:mitad tortas y budines, o pan dulce y mitad frutas secas.
Calculá la cantidad necesaria de comida para el número de comensales porque cuanto más se prepara, más se come. Esta regla también puede aplicarse para las bebidas alcohólicas.
Si hay invitados con hipertensión, reemplazá la sal por condimentos.
Respetá la cadena de frío de los alimentos. Para descongelar un producto es preferible hacerlo en la heladera y no a temperatura ambiente. Y muy importante: no vuelvas a congelar un alimento que ya fue descongelado.
No guardes las sobras por más de tres días en la heladera y no las recalientes más de una vez.
Por último, si bien la cena es el pretexto del encuentro, podemos programar también karaoke, baile, juegos con prenda o cualquier otra opción que nos permita compartir un momento diferente y enriquecedor junto a nuestros seres queridos.