El 4 de febrero fue el Día Mundial de la lucha contra el cáncer. La Organización Mundial de la Salud, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC) y la Unión Internacional Contra el Cáncer (UICC) determinaron que exista este día internacional, con el objetivo de aumentar la concientización en la sociedad y fomentar así, la prevención y el control temprano de esta enfermedad.
Si bien la información que tenemos sobre la prevención del cáncer está en constante evolución, tu estilo de vida puede aumentar o disminuir el desarrollo de esta enfermedad.
Te dejamos estos consejos de vida saludable para la prevención del cáncer.
1. No consumas tabaco
Fumar está relacionado con el cáncer de pulmón, boca, garganta, laringe, páncreas, vejiga, cuello uterino y riñón.
2. Llevá una dieta saludable
Consumí muchas frutas y vegetales, elegí menos alimentos ricos en calorías, como los azúcares refinados y las grasas de origen animal. Bebé alcohol con moderación y limitá el consumo de carnes procesadas.
3. Mantené un peso saludable y realizá actividad física
Esto podría reducir el riesgo de desarrollar cáncer de mama, próstata, pulmón, colon y riñón.
Además de controlar tu peso, la actividad física ayuda a reducir el riesgo de desarrollar cáncer de mama y de colon.
4. Cuidate de la exposición al sol
El cáncer de piel es uno de los tipos de cáncer más comunes y uno de los más prevenibles.
Evitá el sol del mediodía, quedate en la sombra el mayor tiempo posible cuando estés al aire libre, usá protector solar (en lo posible mayor a FPS 30, incuso los días nublados) y evitá las camas solares.
5. Vacunate
Siempre consultá con tu médico acerca de las vacunas a aplicarte, pero vacunarte contra algunas enfermedades, que en su desarrollo puede llevar a generar algunos tipos de cáncer, es una manera de prevención, por ejemplo contra la hepatitis B o el virus del papiloma humano (VPH).
6. Consultá a tu médico de manera regular.
Los autoexámenes y exámenes regulares para varios tipos de cáncer, como el cáncer de piel, de colon, de cuello uterino y de mama, pueden aumentar tus probabilidades de descubrir el cáncer a tiempo, cuando el tratamiento tiene más probabilidades de ser exitoso.
Es importante que sepas que actualmente, gracias a la existencia de diversos tratamientos, más de la mitad de los cánceres que se diagnostican de forma temprana, pueden curarse. Por este motivo se aconseja la realización de estudios preventivos: a las mujeres, a partir de los 25 años, el PAP y a partir de los 50 años, la mamografía; a varones y mujeres mayores de 50 años, se les recomienda realizar el test de sangre oculta en materia fecal.
Por último, consultá a tu médico si presentás alguno de estos síntomas.
Bultos o masas extrañas en cualquier parte del cuerpo.
Fatiga, cansancio, falta de aire o tos.
Sangrados o hemorragias imprevistas.
Pérdida de peso repentina o falta de apetito.
Dolor.
Complicaciones al tragar o al orinar.
Sudores nocturnos intensos.
Cambios en un lunar o manchas en la piel.
Cambios en las mamas.